Posturas
recomendables
Ponte
en cuclillas, apoyando la planta del pie entera en el suelo y con los
talones debajo de las nalgas. Mantente en esta posición el tiempo
que puedas.
Este
es un ejercicio muy bueno para los muslos y los músculos de tus
pantorrillas.
Procura
habituarte a él y adoptar esta postura cada vez que tengas que
agacharte, en vez de inclinarte hacia delante. Te costará bastante
trabajo quedarte así sentada durante un rato.
La
Respiración
Para
mejorar la circulación en general debes aprender a respirar eficazmente.
Sentada en una silla, coloca las manos sobre las costillas inferiores
y siente como las costillas se expanden al inhalar con profundidad. Se
debe expulsar el aire y repetir varias veces.
Una
respiración controlada es parte importante en la preparación
del embarazo.
Mientras
estás sentada cómodamente en una silla, practica el control
sobre los diferentes músculos implicados en la respiración.
Comienza por respirar a través de la nariz, permitiendo a la pared
intestinal hundirse. A continuación, llena la parte superior de
los pulmones respirando por la nariz, dejando que el esternón,
o el hueso del pecho, se levante. Expulsa el aire sintiendo como las costillas
y el esternón se hunden de nuevo.
Los
Pies en Alto
Es
extremadamente bueno para las mujeres embarazadas, en el último
período del embarazo, pasar un determinado tiempo al día
con los pies en alto.
Levantar
los pies más arriba de las caderas alivia la presión de
las venas de la pelvis, contribuye a la circulación de las piernas
y previene contra las varices y la hinchazón de los tobillos.
Siéntate
bien atrás en una silla con un almohadón detrás de
la espalda y los pies levantados sobre una mesa, o una silla.
Alternativamente,
puedes acostarte sobre el suelo, con la cabeza sobre una almohada y los
pies apoyados en una mesa baja o en un taburete.
Ejercicios
Recomendables
Este
ejercicio te enseñará a controlar la inclinación
de la pelvis, a mejorar tu postura, y a aliviar el dolor de espalda. Acuéstate
de espaldas, con las rodillas hacia arriba. Respirando normalmente, tensa
los músculos de las nalgas apretando los glúteos y, simultáneamente,
mete los músculos abdominales sintiendo la curvatura de la espalda
presionando sobre la cama o el suelo. Resiste 5 segundos y relájate.
Repite este ejercicio hasta 5 veces lentamente.
El
mismo ejercicio puede realizarse sentada sintiendo la curvatura de la
espalda presionando el respaldo de la silla.
Realízalo
alternativamente de pie, sin doblar la pierna. Siente la curvatura plana
a medida que contraes los músculos hacia arriba y hacia abajo.
Para
evitar los Mareos
Si
sientes una sensación de desvanecimiento, aprieta las rodillas
hacia atrás y tensa los músculos en la parte anterior del
muslo.
Esto
incrementa la circulación, reduciendo la sensación de desmayo
al enviar más sangre al cerebro.