La
Mifepristona o RU 486 Es
un antagonista de la progesterona que ha sido registrado como Myfegyne
en Francia, Suecia y Gran Bretaña, y su autorización en España es para
su uso en hospitales y clínicas autorizadas.
Este medicamento fue desarrollado
por el laboratorio francés Roussel Uclaf, que vendió los derechos a Exelgyn,
y fue comercializada por primera vez en Francia, en septiembre 1988.
La mifepristona es una forma
de aborto terapéutico, constituyendo una alternativa al aborto quirúrgico.
Aunque no es tan eficaz como este último, presenta menos riesgos (los
ligados a la anestesia y a la propia intervención quirúrgica) y no es
preciso la hospitalización de la mujer.
Su registro en Europa se
va a hacer por el método de Reconocimiento Mutuo, actuando Francia
como estado de referencia, y España como estado concernido,
y se prevé que la autorización definitiva a nivel europeo, se produzca
en abril 2000, por lo que hasta entonces en España sólo puede obtenerse
a través del negociado de Medicamentos Extranjeros, sin que se
haya producido ninguna petición de suministro hasta la fecha.
Características
farmacológicas
Es
el primer antiprogestágeno disponible. Es un derivado 19-noresteroídico
sintético, con una cadena lateral en el carbono 17 y un anillo extra en
el carbono 11. Su acción abortiva parece ser mediada por los efectos
antiprogestágenos sobre los receptores progestagénicos del endometrio.
Este fármaco también desarrolla una potente actividad antagonista glucocorticoide,
y ha demostrado cierto grado de utilidad en el tratamiento del síndrome
de Cushing.
Administrado el fármaco durante
la fase lútea, su efecto induce la menstruación y permiten la liberación
de prostaglandinas en el endometrio, si se usa en una mujer embarazada
(hasta 56 días después de su última menstruación), suele producirse un
aborto espontáneo que no requiere la evacuación quirúrgico del contenido
uterino.
Esto se produce por que provoca
una rápida reducción de los niveles de gonadotropina coriónica humana,
motivo por el que el embrión es desligado. A continuación, la supresión
de la función ovárica conduce a un efecto luteolítico irreversible. Además
parece ser que también participa en la liberación de prostaglandinas endógenas,
que incrementan la contractibilidad del miometrio y reblandecen y dilatan
el cérvix, lo que facilita la evacuación de las capas externas del útero,
junto con el embrión.
Su acción como anticonceptivo
depende del momento en que sea administrada a lo largo del ciclo menstrual.
Si se da durante la primera mitad de la fase lútea, se produce una inducción
de la menstruación, que es independiente de la luteolisis, si se da en
la fase intermedia, produce una hemorragia menstrual al cabo de los pocos
días, como consecuencia del aumento de los niveles de progesterona y de
estrógenos, produciéndose la menstruación en las fechas esperadas en 2/3
de las mujeres. Si se da en la parte final de la fase lútea, la hemorragia
menstrual ocurre en 1-3 días.
No provoca ningún efecto
sobre la duración del ciclo menstrual si se administra en los 3 primeros
días de este. En la fase folicular tardía, inhibe la ovulación, al limitar
la producción de hormona luteinizante o LH.
Su acción antiglucocorticoide
se debe a que tiene una afinidad similar a la dexametasona por los receptores
glucocorticoides, produciendo un efecto antagonista neto, al carecer de
efectos agonistas. A parte de esto, también se une a los receptores androgénicos,
aunque prácticamente no produce efectos antiandrogénicos, debido a que
desarrolla una afinidad hacia estos receptores mucho menor que la testosterona.
La dosis óptima aún no ha
sido determinada, aunque la más habitual en la inducción del aborto es
de 600 mg en una dosis única o de 25-100 mg/día durante 5-7 días, seguido
de una dosis única de una prostaglandina (generalmente misoprostol).
El efecto abortivo se manifiesta
como una hemorragia uterina que se produce al cabo del día 5 tras el inicio
del tratamiento.
Efectos adversos
-
Cefaleas: 15% de las
pacientes.
-
Náuseas y/o vómitos:
40-45% (leves o moderadas, responden a los antieméticos)
-
Dolor uterino (de tipo
menstrual)
-
Hemorragia (puede llegar
a precisar la realización de transfusiones sanguíneas)
Comparación
con otros métodos terapéuticos
- Aborto
quirúrgico
La
asociación mifepristona + misoprostol, es más seguro que el aborto quirúrgico
y mucho mejor aceptado por parte de las mujeres, aunque parece producir
una mayor incidencia de efectos adversos, y un mayor índice
de fracasos (5-10% y hasta el 16%, frente a un 0-4%)
-
Anticoncepción
postcoital (estrógeno/progestágeno en altas dosis)
Produce
resultados similares al tratamiento antiguo (etinilestradiol 100 mg
y norgestrel 1 mg..... 2 neogynonas cada 12 horas 1 día) valorándose
en un 20% el índice de fracasos.